Bolonia

¿Por qué deberías visitar Bolonia?

Bolonia es una de las ciudades más grandes en toda Italia y los primeros asentamientos en el área datan hasta del siglo X A.C.

Es el hogar de una de las universidades más antiguas del mundo, fundada en 1088.  Hay muchas torres y pórticos que descubrir en Bolonia, especialmente durante una visita al centro histórico de la ciudad, que es uno de los más grandes de Italia. Debido a la restauración cuidadosa llevada a cabo en los años 70’, los temas celtas, romanos y etruscos aún están en las calles.

¿Estás listo para experimentar todo lo que Bolonia tiene para ofrecer? Aquí te presentamos algunos paisajes esenciales que tienes que ver cuando viajes a esta hermosa ciudad, para que disfrutes de tus vacaciones.

El icónico Due Torri debería estar en los primeros lugares de tu lista.

Las dos torres de Bolonia podrán no parecer anda especial al principio, pero cuando las veas por ti mismo te darás cuenta que ambas están inclinadas. Estos símbolos de la ciudad tienen nombres derivados de las familias acreditadas por su construcción. Fueron construidas al principio del siglo XII, y las torres han sido usadas por científicos a lo largo de los siglos para estudiar los movimientos de los planetas y las estrellas. Incluso después de ataques aliados, las torres se usaban para dirigir operaciones de rescate.

Puedes subir a las dos torres, pero prepárate para un viaje largo y sinuoso. La torre más alta, de casi 100 metros de altura, es toda una escalada. Incluso la torre más pequeña, la Garisenda, tiene 48 metros de altura. Enfréntate a esta escalada  podrás decir que conquistaste este monumentos de Bolonia ¡y que además estuviste en una torre inclinada!

La Plaza Santo Stefano tiene mucha acción.

Podrías ir a visitar las históricas basílicas y pasar un buen rato explorándolas por dentro y por fuera, pero nuestra recomendación es ir a la Piazza Santo Stefano. No solamente estarás rodeado por los pórticos que hicieron famosa a la ciudad, sino además podrás pasear por un increíble mercado de antigüedades. Toma un café, paséate bajo los toldos y encontrarás una que otra tentación.

También podrías querer explorar a lo largo de la Via Emilia, que fue la primera vía cuando la ciudad estaba en desarrollo durante los tiempos etruscos y romanos. La calle aún corre a lo largo de la ciudad y está habilitada principalmente para peatones, con los patrones cuadriculados de los romanos, tal como fue construida. No verás fortificaciones romanas, pero muchas murallas medievales que datan del siglo XIII están aún visibles.

Con más de 38 kilómetros de pórticos nada más en el centro de la ciudad, puedes caminar todo lo que quieras en Bolonia y nunca estar expuesto a los elementos. El pórtico di San Luca es quizá el más grande del mundo y conecta las murallas de la edad media con el Santuario de la Madonna di San Luca, ¡lo cual ya es un paseo maravilloso en sí mismo!. Siempre hay algo nuevo que descubrir en Bolonia y esa es la razón por la que visitarla siempre es una gran experiencia. ¡Planifica tu viaje hoy mismo!

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